No sé si es un ajuste con la vida
pero es un reencuentro con mi pasado...
No sé si mis errores me llevaron
a este encuentro que el destino preparó...
Mis recuerdos que se remontan a mis cinco años
ya comienza con la incertidumbre con mi futuro.
Estábamos yendo para un nuevo hogar
para rehacer la vida y el río Paraguay
nos llevaba hasta la capital...Asunción.
Mi padre a espera y nosotros en nuestra inocencia
comportíamos una aventura...
Sabíamos por lo menos, yo, que estábamos yendo
al encuentro con mi padre...
Desde allí se inicia mi lucha con el destino
cuanto sufrimiento e inseguridad
yo, un chico pasando por tantas desventuras
así fui construyendo mi vida
por momentos teníamos felicidad
en otras tristezas y llantos...
Tal vez fui aquel que más sufrió
no puedo dimensionar y juzgar la vida
de mis padres y hermanos...
Quizás ellos sufrieron mucho más
yo no lo sé
la única certeza es que sufrimos mucho...
De allí viene mi alma de poeta
por eso siento la necesidad de escribir
tanto en la alegría como en las tristezas...
No soy perfecto y ni pretendo
de tanto querer lo mejor
para los míos cometo errores
que me sangran a tantos años...
A veces quiero creer en Dios
siento la necesidad de hacerlo
y en otras me siento tan incrédulo
que me lleva a cometer el pecado
de culparlo de todos mis errores...
Quizás sea injusto
yo no lo sé
tan solo sé y reconozco
que lucho, luché y lucharé
por los míos...
Algunas veces erróneamente
en otras con acierto
y creo que no es justo
pasar por lo que pasé, paso y por lo que estoy pasando...
Juzgar es fácil
como también dar consejos
pero para quien está luchando a tanto tiempo
el cansancio llega y es cuando comenzamos a desistir de la vida...
No quiero hacerlo
no quiero desistir
pero estoy tan cansado
que ni fuerzas tengo
para darme ánimo como en antaño...
Hoy no sé
cual será el final
de está aventura
y espero que sea
por lo menos un buen final...